RICARDO ALVAREZ

FUE LA LUNA - de crepusculo

 

Fue la luna con su odio y

el sol enquistado de rencor,

pero el blanco tulipán impuso

su ensanchada estructura.

Caía la lluvia, con la fragilidad

del cemento fracturado en su hora de retiro.

¡Amada!

El pan sobrevivió nuestra dulce firmeza

y derrotó la garra maligna del astro en celo.

Nuestro habitáculo de amor y acero

revelaba sus secretos de mágica estrella.

Amor..

el destrozado árbol recuperó su fortaleza con nuestro rayo de luz

y reconquistó las caídas murallas de la derrota

cuando hiciste tu figura de amarilla tierra

destronando las celosas aves y

marcaste con tu dedo de frontera el vuelo de sus limites.

Mientras la luna juntaba sus celosos harapos de venda,

tú abrías la inmensidad de nuestro país de isla

a la mirada constelada del mundo.