La libertad no tiene llave. El amor es un tesoro.
Son la clave y la esencia. Instrumento y partitura.
El valor es su universo. Su paisaje la ternura.
Libertad y amor son eco y voz de un solo coro.
Regalos de los Dioses que no atienden a razones,
nadan y se hunden pero salen siempre a flote.
En la tierra son caballos cabalgando a todo trote,
que han superado barreras, miserias y traiciones.
El amor y la libertad son viajeros invisibles.
No se les puede atar con cadenas e imposibles;
ya que suelen atracar en los muelles de la luna.
Dejad que sigan renovando sus colores;
ya que en el cielo de su luz, no hay delatores.
Dejad que brille el almanaque del sol bajo su cuna.