Sacarte de mi mente no he podido
Sacarte de mi mente no he podido
mi pecho obsesionado está sin calma,
es como un dolor al corazón prendido
que me enloquece y martiriza el alma.
Tu bien lo sabes, no te buscaría
aunque quisiera de nuevo buscarte,
yo se que esperas que regrese un día
aunque no sabes lo que duele amarte.
Cuando me miran de soslayo a veces
esos tus ojos que tanto he besado,
es tu mirar tan triste y tan callado
que se que en tu mirar me perteneces.
Pero es pasado lo que fue pasado,
y siento que al mirar te desvaneces.
Rafael