No retires de mí tu mirada, No me quites la luz Que de tus ojos destella, Que en mi vida aun queda. Es tu luz la que aun queda, Que mi vida día a día de ti Con premura y permiso tuyo, Para salvarme de la obscuridad. No me dejes sin tu sonrisa, No me quites el gozo Que al verte sonreír me dejas, Esa es la felicidad de mi corazón. Es esa felicidad que me alienta, A despertar y vivir con fuerza Desde el amanecer al ocaso, Solo con verte a mí sonreír. Perdón si a tu corazón apuro, Pero el tiempo para mi no pasa, Quisiera saber del corazón el futuro Saber que tu corazón me corresponde. Perdón si pregunto lo que no debo; Quererte es un premio y un castigo, Pues me siento dichoso de quererte Pero castigado por no tenerte. Así es mi la vida mi suerte, Quererte sin poder tenerte, Quererte sin saber si soy querido, Poder porque estoy vivo