¿Dígame usted señor Juez
cual fue mi delito?
Si yo era feliz ayer
volando por el infinito.
Dios al nacer me hizo libre,
me dio el cielo y el horizonte;
perdone que yo denigre
cuando la justicia se corrompe.
Yo amo mi libertad,
para que voy a mentirle,
quiero que defienda la equidad
para volver a ser libre.
Revise mi sentencia de prisión,
y verá que es injusta mi condena,
y si no hay delito por favor
es menester que se me absuelva.
Me dieron privación de libertad,
yo diría que perpetuamente,
porque de las rejas me sacarán
solo ante la presencia de la muerte.
Soy un pobre pájaro enjaulado
que ha perdido su derecho al vuelo,
porque unas manos me lo han robado
trayéndome dolor y desconsuelo.
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