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Sueños que sueñan tus sueños
En una noche cualquiera
que van tus pies dormidos
Por las viejas veredas…
Un rocío riega tu tenue cabeza
Y en tu pecho se anida todo el dolor…
Y tu pobreza…
La noche es larga como tu vida sedienta
Tu mirada limpia y tu voz macilenta
Van buscando un abrigo en esta selva hambrienta.
Todos caminan a tu lado sin saber siquiera
Que lo único que deseas es el juguete de la vidriera;
y en tu bolsillo una sola moneda y
un pedazo de pan que será tu cena…
Hay en tu silencio una gran elocuencia,
y en tu mirada,
niño…
Una tierna inocencia…
Mientras la luna despierta en la noche serena
vas buscando el refugio
que calme tus penas…
y en hastío mar de estrellas
tus ojos cansados otra vez se cierran.
Ya mañana volverás a la vidriera
A soñar con el juguete que tanto quisieras;
Mientras tanto duerme que en esta noche serena
Un ángel vela por tus sueños desde la vidriera.