GITANA DULCE

LA CONCHA Y LA PERLA

Me he enterado, casualmente que cuando, en la concha colocada en el fondo del mar, entra un grano, un pequeño grano de arena, comienza en secreto una larga y maravillosa historia de dolor y de amor.

El grano causa dolor y quema, pero no es posible quitarla por mas que la concha se esfuerce. Esa herida hace brotar pequeñas lágrimas, y el amor delicadisimo y precioso se consolida alrededor del grano en una rosa color perla.

Ahora duel todavía más y brotan mas lágrimas que aumentan un nuevo esplendor. Pequeña rosa naciente en la oscuridad de la concha.

Pasa un largo tiempo, tempestades y borrascas pasan en el fondo inmutable del océano. En la medida en que la perla crece, la concha va desapareciendo.

Agotada, adelgazada, se va consumiendo en sus lágrimas, y reducida a la nada, ya no se ve.

En su lugar, la perla resplandece, bellisima y transparente. Y acontece algo maravilloso: La concha colocada en el fondo del mar va abriendo su valva y por primera vez aparece el tesoro, maravilla para los habitantes del mar y para cuantos tienen la suerte de poseerla. La concha, ha dado vida pero nunca ha sabido como. Vida que nace de la muerte, amor que vence el dolor.

Tampoco los otros recuerdan la concha, contemplan felices la perla nacida del fondo del mar. El molusco se ha consumido dando vida a algo mas precioso, que solamente al final viene a la luz.