Querida mìa
A veces te imagino
Una Celestial Princesa
O como el Rocìo divino
De una paradisiaca flor
Incluso pienso que eres
Una Mujer prodigiosa y única
Que te cruzaste en mi camino
Para darme amor y felicidad
Pienso que eres la dueña
De un raro misterio
Que no quiero descubrir
Porque cuando acercas
Tus delicadas mejillas
A mis anhelantes labios
No hago más que pensar
En jamás dejar de adorarte