en la soledad de la noche
en el silencio del tiempo
en mis ansias colmadas
eres luz en tinieblas
en mis dudas mudas
en los miedos ensañados
en mi enfermedad sobrada
eres la cura definitiva
en los suelos del animo
en las penas soberbias
en el ego perdido
eres resurrección dada
en la pobreza abundante
en la sonrisa etiquetada
en estas horas paradas
eres patricia
reverencia destinada
hasta el fin de los días
por el amor que esperaba
eres mi sueño realizado