Después de rodar por el mundo
Llegue al lugar donde me esperabas,
Para cubrirme de besos.
Tu piel satinada con delicado perfume
Cobijo mi alma con mansedumbre.
Tus caricias cubrieron mi cuerpo
Mis oídos cubiertos por tu silencio.
En tu regazo quede dormido
Me proteges con maternal cariño.
Todas las noches del inclemente frio
Impidiendo que caiga en el abismo
Cada noche escapan los suspiros
De un amor placido y profundo
Porque siempre sueño contigo.
Eres maravillosa amante de noche y de día
Eres mi fortaleza, eres mi cama
Donde siempre me llega la calma.