JESÙS Y MAGDALENA EN EL ARROYO
Por caminos verdes y destapados propios de la llanura que nos circunda
Caminamos juntos.
Mis pies acariciaban los tuyos
Pasos para desnudarse y formar caminos de herreros
Hacia al infinito que circunda nuestra imaginación.
Yo seré consciente de todo acto que haga para ser feliz a tu lado
Y tú pisaras mi tierra para plantar tus semillas en esta llanura fértil para labrarse un nuevo plantío de esperanza.
Así meditamos juntos en al arroyo como una Magdalena con su Jesús.
Por un momento pensé
Oh mi buen Jesús el mandamiento del amor
¿Lo inspiro una mujer al besar tus pies?
Con la pureza que circunda sus almas
Sus pies sintieron entrega y amor.
¡Besar los pies!
Y los doce apostales por su mandato
Se descalzaron y èl también hizo lo propio.
Mi buen Jesús. Bajar hasta la Tierra para besar los pies de otro
Tal vez como Magdalena lo hizo
El acto de ir hasta lo mas bajo
No derrumbándonos sino dejar de ser….
besar los pies y sus huellas, que hacen camino al andar
Caminos de Paz en el Amor del hermano, o del amor
De pareja Cuando también se besan y se aprietan con sus dedos.
Yo tome como una Magdalena
Agua del rio
Para lavar tus pies, los seque con mis cabellos y los bese.
Alcance a ver lo grande que te veíais sentado
La perspectiva daba como centro un cielo perfecto a mi vista
Y seguí para ser acariciada por el agua que corre y deshace mi piel para ser renovada en ella.
Y ahí estábamos cobijados bajo un firmamento
Tranquilo en aquella piedra me acaricia tu mirada
Y tu sonrisa afirmaba la ligereza mía y la libertad para envolverme en la misma agua con que fui bautizada.
Deje correr todo, hasta el trapo que tenia de vestido y flote para vivir
Yo siempre buscando el cielo
Yo bosquejándome en un paisaje para ser uno con él.
Tú, un espectador escribiendo con tus ojos
Notas sobre la energía para converger en el mismo sur
Tu en la tierra quieta y yo en agua que corre.
Tú te volvías verde
Yo clara y diluida hacia más verde el plantío de tus pies
Agua que vertí a cada paso
El verde no será seco.
Y si es desierto seguirá existiendo el cielo para cobijar.
No bajaras solo por aquella montaña
Yo correré a tu encuentro
Y en alguna orilla te esperare
No en la misma piedra
No en el mismo charco
Todos tenemos que evolucionar
Yo no corro hacia arriba
Aunque tu si puedas volver al mismo sitio
Por el viento, eleva los granos de tierra y es fertilizada por insectos
Sentirás mi esencia y mi roció para refrescar la piel
De ti naci, soy el agua que nace dentro de tu planeta terrestre
Y como un oasis lavare tus pies para
Volverlos a Acariciar.
Y tú decidas nadar en mi universo
Etéreo de sueño líquidos
O decidas habitar en la tierra del fondo del rio.