El dia que tu marches
al país de los sueños
donde no te vean mis ojos
ni escuches mis versos.
gritare la rabia
de mi fuero interno,
lanzare mil quejas
al callado eco.
Pero hoy, frente a ti,
guardare silencio,
cogeré tus manos
que no sientas miedo
para que te marches
serena… tranquila…
que libre tu alma,
emprenda su vuelo.