Pasan las horas y muere la mañana,
Descansa el sol pensado en la luna
Se cubre de nubes algo azules,
Y se refleja en el vasto mar.
Contemplo los risos de la tarde
Colgando de tu manos,
Y tú voz, se mese en el viento
Como mis pestañas en tus labios.
Se fricciona en mis oídos adormecidos,
Tu voz que refresca el viento,
Atenúas con el paso del tiempo mi sufrimiento
Invocas miradas tiernas a mis ojos,
Y nos abraza la calle bajo los pies.
Trazas un corazón en el lienzo de aire,
Pigmentas sin esfuerzo tu alegría
Y la tarde…
Se recuesta bajo los brazos de la noche
Tú…
Violentas mis brazos en un abrazo,
Secuestras mi boca con tus besos
Y muere la tarde de apoco.