Entre la ansiedad y la paciencia,
no es grande la distancia,
si al crepúsculo mi estancia,
Escasea de existencia.
Entre el amor y la ilusión,
es angosto el espacio,
Si a las caricias, el cuerpo reacio
arolla aquella primera impresión.
Entre los recuerdos y la locura,
¿dónde habita la cordura?
¿quién olvida la razón,
por la que le latía dentro un corazón?
Si se olvida lo que se ama,
jamás lo que dolor causa,
si su vacío me llama,
me dice que ya descansa
Que le deje, que le olvide,
pero el dolor revive,
cada recuerdo que el tiempo divide,
y aunque la vida me dice "¡vive!",
¿Quién osa a vivir sin vida?