Léeme un cuento de princesa
que vivan feliz en su castillo
o de bosques de mucha belleza
donde canten las ranas y los grillos.
Léeme un cuento por favor
Igual al que leíste aquella vez
cuando al leerlo cambiaste la voz
para luego reírnos después.
Léeme un cuento donde haya vida que no tenga brujas que asusten,
para poder quedarme dormida
abrazada a mi osito de peluche.
Alejandro J. Díaz Valero