Aún siento que estoy en el pecado
Que el eco de voces públicas no me acobarda
Sé que estoy amando y no he acabado
Y las cuitas del purgatorio no me desbordan.
Tu cuerpo que ha Dios estregaste lo he profanado
Cual ciervo descarriado que busca dueño
Tu corazón que andaba sellado lo he desangrado
Y mi cuerpo impuro no despierta de este maldito ensueño.
Basta de secretos que la cruz no es de hierro
La carne se desgarra por la astilla de su madero
Perdónenme si amar es como yo quiero
Que ni Dios me importo por hacer
este amor duradero.