Muchas veces la observé
levantar el vuelo,
por el amplio azul del cielo,
con una amplia sonrisa en los labios,
sabiendo que descendería.
hoy me he quedado,
como un barco a la deriva,
sin puerto donde anclar,
las tibias miradas mías.
Busco un porque,
se fue tan lejos,
la niña de mis sueños.
Quisiera sol,
brisa,
roció,
nube o estrella,
para tenerte,
por siempre cerca.
El arco iris de mi vida
se marchó con sus mil colores,
dejándome la vida en grises,
sin matices y sin sabores.
Si una fresca brisa,
roza de pronto tu cara,
ten presente,
hija de mi vida,
que es tu padre,
que te añora.