Estoy enfermo por tu ausencia,
me asfixia la soledad,
me carcome el aburrimiento.
Solo espero el tónico de tus besos,
porque cuando te beso y me besas,
bebo el néctar de la vida,
bebo el ilixir que me cura,
bebo el remedio para amarte.
Necesito recibir el rayo de tus ojos,
porque mis pupilas reclaman tu mirada.
Necesito sentir los latidos de tu alma,
porque mi corazón palpita tu lejanía.
Necesito sentir la tibieza de tu piel,
porque mis manos te buscan en el vacío.
Todo eso necesito para sanar y vivir,
porque estoy enfermo por tu ausencia.
Silvio Reinoso