Esperanza en la mirada,
afuera un mundo incierto
su ilusión aún callada;
ya despertará el huerto
donde se siembre la semilla
que verá crecer a la mujer
que se cultiva en la niña.
Habrá un mañana…
de obscuridad y luces
lejos, en la montaña,
donde elevan oraciones
de piedad y armonía
con mágicas canciones,
para vivir cada nuevo día.
Por la ventana verá pasar
entre luna, bruma y sol
el transcurrir de sus años
que pintó en sus mejillas
bello paisaje multicolor,
que en su tierra se reflejó.
¡Si habrá un mañana!
para su inocencia de hoy,
labrará un futuro mejor,
para el gran pueblo que lleva
prendido en su humilde corazón.