Los enigmas que ocultas a la sombra se mostraron
Tu alma se desviste a través de tu mirada,
Mis cristales hoy contemplan tu interior
Veo un niño que llora a gritos su amargura,
Escondido en el silencio que te cubre
Con miedo, con espanto, con horror
Vigilando los caminos recorridos
Que se aferra y se cubre a una sombra silenciosa
Tratando de abrazarse a una esperanza
Que la vida le regale al azar.
Se quedó perpleja mi alma al contemplar
Como ruedan suicidas sus lágrimas
Perforando las entrañas del silencio.
Es dolor que se derrama a raudales
Pues jamás podrás comprender
Lo que es el verdadero amor por que nunca lo tuviste
Es invierno hay tormenta.
Que hoy te azota corazón de niño bueno
Ten mi mano fraternal, nada más puedo entregarte
El amor que por ti, en mi existía, lo mataste.
Ven desandemos los senderos que dejaron
Grandes huellas en tu alma
Cruza el rio torrentoso,
Solo Tú debes hacerlo
Así sabrás lo que la otra orilla te depara
Para que no mueras jamás
Condenado a tenues llamas.