Blas Roa

Con versos un adiós.

Amor, cuando falle la luz del buró,

cuando el sol te madrugue las entrañas,

cuando sean fiebre y mala-saña,

cuando se repita la cura del dolor.

 

Cuando vivan de muerte los féretros,

y sude tinta china la piel de mi pueblo,

cuando fumes y bebas el llanto del ciervo,

cuando por fin culmine el siglo que se acaba.

 

Cuando los besos sean lagañas en la boca,

cuando los corazones estallen a flor de piel,

cuando Cristo sobreviva la verdad de su mujer,

y el diablo se drogue en el mar del maná de los conformes.

 

Por fin amor, no duelo ni padezco eso que llamas,

que finges, que colisionas, que clonas y que olvidas.

Cuando sean de agua viva, tus lágrimas reptiles,

cuando el dolor se anime a no sentir nunca más.

 

Entonces amor, basta de radioterribles pasados.

Cuando esto ha terminado, cuando no se sabe cumplir,

yo que quise esculpir, ahora me veo moldeado...

a tu ayuno solapado, a tu triste final feliz.

 

Blas Roa