Mundo ignoto
Un jarrón de nardos olorosos
en una mesa de madera noble;
te veo desde una distancia amable:
tus bailes hermosos,
tus labios sabrosos.
Queda un silencio roto
en este leño donde floto;
busco tu presencia
en este vino que se escancia
como un amor ignoto.
Un sauce llorón duerme,
en un arriate nace una flor:
la vida es amor, ¿de que color?
que sea bonito: necesito quererme,
ahora estoy atrapado:¡ven a socorrerme!.
No soy de este mundo, sino de otro,
allí todo es un espectro,
mi otro mundo, es la obscuridad,
el reino de la orfandad,
en sus mazmorras me encuentro.
Se rompe el silencio:
suena la música de un violín
en este apartado jardín;
a su melodía renuncio
¡soy débil! todo es un suplicio.
La ciudad esta amurallada,
allí, mi alma esta atrapada,
las sombras la vigilan,
necesito ser un gavilán,
para huir de esta ciudad desolada.