Después de haber examinado
la confusión que el sectarismo crea
creyéndose de la ley apoderados
con la luz escribo para que se lea
la verdad, y con la claridad se vea
os saco de las escrituras
las siguientes sentencias
que claras, trasparentes y puras
anidaran en las buenas conciencias
iluminándose con las evidencias
en esta oscura era
los demonios se vestirán
de santos y con falsas maneras
a los incautos les inculcaran
envidia, ritos, soberbia y vanidad
la adivinación es charlatanería
la magia esta condenada
y la abominación de la idolatría
es la ignominia mas descarada
es vana fe en estatuas talladas
quien la ley la practica
se aparta de oscuros ritos
y guardándola el edifica
su fortaleza con los divinos edictos
del único Dios, poderoso e invicto
el impío que deteste
al justo y lo persiga
y lo maldiga echando pestes
haga lo que haga o diga lo que diga
caerá el y todo aquel que le siga
un imprudente se acerco al fuego
y sin saber bien donde se metía
comenzó un peligroso juego
con el fuego que sereno ardía
y cauto veía lo que le venia
atizaba el fuego, y este respondía
caballerosamente y gentilmente
y con enseñanzas llenas de armonía
le instruía por piedad y diligentemente
avisando del peligro inminente
creía en sus posibilidades
y ególatra, en el fuego se media
y sin aceptar que las casualidades
son sentencias de la divina sabiduría
del fuego recibió lo que mereció
el fuego es la verdad
es la conducta sincera
es perdonar por piedad
es curar la terrible ceguera
del mió y tuyo que es una quimera
es humanidad, es sencillez
es valentía ante la injusticia
es dar por amor y con calidez
es liberarse del egoísmo, la malicia
y la desfachatez que desquicia