Si, confieso que fui yo quien camino dentro de ti, quién tomo parte de tu corazón, quién trato de robar todo de ti, Quién se esforzó para recorrer los más largos tramos en tu vida, y dejar aquellas huellas que las lluvias aun no han podido borrar, soy yo el mismo que se atrevió adversar todos los obstáculos, confieso que fui yo quién te cedió espacio de mí espalda en aquellos momentos que en busca de aire sentías desmayar, camine dentro de tu vista como una imagen angelical, sucumbí ante tus encantos, me ahogue al escuchar tu llanto, reviviendo con tus carcajadas, emanando de mí palabras inesperadas, expresando todo aquello que de mí cosechabas, camine dentro de ti, sin tiempo para el descanso, sin conseguir un regazo, camine y me atreví, porque en la mayor travesía de mí vida,
camine dentro de ti.