“Creo que tango es eso que provoca, un clavel en la sopala cuando no tengo ni para claveles y voy a verte”... Horacio Ferrer
Es buscarte
cerrando los párpados
para en mi guardarte,
mientras corro lejana a regocijarme,
en ese nosotros instantáneo.
Y perderse…
en las instrucciones de algún corazón
cursivo o intrincado,
desconfiando de la noche.
Es enloquecer
cuando la ausencia es mucha
y te descubre mitad
o te encuentra desnudo de alma.
Y escapados
los pájaros y los duendes,
solo queda uno,
decidido a emprender regreso
devolviéndose lentamente
en piel, corazón y sentimiento.
Y respirar…
Respirar entregándose todo
en una mirada, en un suspiro…
y al instante alborotarse por dentro
soltando todas las palabras a volar
y sin entender nada
verlas adherirse a tu cuerpo.