Jesús Lantigua

ORGASMO

 

Sentencia de besos y posesión,

 

clímax inefable de fuego carnal.

 

Ardor que recorre el cuerpo,

 

en tenencia del alma.

 

Doble monólogo desequilibrado,

 

angustioso, incoherente;

 

germen irrefrenable de extraversión.

 

 Imágenes eróticas,

 

gráciles, capaces de pulular en la estrechez del

abrazo;

 

Dueto histórico y humano,

 

 del músculo contráctil

 

y las neuronas apasionadas.

 

Esperma cálida que brota incontenible,

 

que se adhiere a la piel

 

y moja las sábanas.

 

Vuelo de alas, sin barrotes oscuros,

 

libertad de la vida sin ataduras.

 

Senderos floridos por donde avanzan,

 

colmados de lujuria,

 

los cuerpos desnudos.