Que la vida tiene tunas y las tunas son muy verdes
Que ahora si hay que comer, pues hay tunas,
tunas para el pueblo hambriento, aunque estén muy verdes.
¡Va! Esas son pamplinas.
¿Qué dijo?
Que los educandos ahora si serán enseñados
Que los profes se apuran para tener niños soñados
Y que todos contentos veremos un mundo nuevo
Pues los de arriba ahora si dijeron,
que hay que darles estudios
a los del pueblo,
Pues un pueblo instruido, es un pueblo de todos,
y ya no habrá poderosos, pues todos somos iguales.
¡Va! Esas sí son las pamplinas de las pamplinas.
¿Qué dijo?
Que el trabajo no va para abajo, que ahora va para arriba,
pues los enterados dicen, que hay puerco para rato
y patas para arriba.
¡Va! Esas sí siguen siendo meras pamplinas.
¿Qué dijo?
Que los políticos no roban. Que los de enfrente tampoco,
Que hubo una revolución y que todo fue una bendición,
por querer dar a los demás, más de lo mismo, sin agitación,
y muchos de los que se metieron saquearon hasta el rincón.
Pero eso es cosa de la nueva revolución.
Acá, ya todos cambiamos en evolución.
¡Va! Esas son pamplinas, de las repamplinas.
¿Qué dijo?
Qué la salud va a llegar a todos, pues pronto arribarán
las buenas medicinas, las de verdad,
pues es un reclamo de los que no tienen ni para calzón.
¡Va! Esas siguen siendo las mismas pamplinas.
¿Qué dijo?
Todos tenemos fe, en que a todos se nos atienda,
con una sonrisa en la boca y con una atención desmedida.
¡Va! pamplinadas.
¿Qué dijo?
Que ya no hay por qué cambiar,
que los arriba están contentos y los de abajo más.
Para que meterse en problemas, si de lamentos
se la pasan repitiendo los que van por la calle
y entre cuchicheos dicen: “mejor quedarnos callados
pues no vaya a ser que hasta nos vayan desapareciendo,
pues los secuestros de moda son excusas de muchas cosas”.
¡Va! Esas son cosas de la vida, de la vida pamplina.