Luis Rayo

UN SUSPIRO EN SILENCIO

 

Cuando las hojas sean ido

siguiendo su fiel camino,

cuando en tiempo y sin olvido,

en noches de plenilunio

han presenciado ya en las alturas

los encuentros más divinos,

mas ya envejecidas como las horas,

se alejan las hojas taciturnas

ya vencidas por los tiempos.

 Fueron ellas las más queridas

en aquellos años verdes de vida,

y fueron las de las añoranzas

las ahora perdidas.

Un suspiro en el silencio,

 un encuentro hacia el misterio

que en todo tiempo

goza a través del aire,

 y gozosas las hojas en la vida

con las caricias del aire.

Y en el último instante

que la vida le ofrece,

de la nada surge

el reencuentro invariable

con la madre tierra,

 con la tierra húmeda

que huele a santa,

con la tierra santa

del camposanto.