Dicen que los amigos no se eligen
Que es como la lluvia que cae sincera y sin prejuicios
Que es libre como el ave que surca el cielo infinito
Y te encontré, amiga, sin buscarte…
sin siquiera soñarte...
Y fueron nuestras soledades las que hablaron
en el triste dolor de que causa el desamor…
Y te encontré amiga…
y en mi noche de tristeza y agonía
fueron tus versos mi dulce compañía…
y en la oscuridad de mi fría habitación
la luz de tu amistad brilló en mi triste corazón…
Y te encontré amiga…
y fueron tus consejos alas para mi olvido
y tus palabras… una lluvia de alegría…
Ya no estoy solo bajo este manto de estrellas
encontré una amiga…
que me libró de mis noches de melancolías…
y puedo gritar que la vida es bella
cuando tienes compañía…
Y en este instante que es la vida,
te dedico estos versos… mi querida amiga
para que sepas también
que tienes mi compañía…