Sera designio de Dios,
el haberte encontrado?
Será designio de Dios,
que, de ti, siga enamorado?
Tengo que confesarte un pecado,
que, contra tí, yo cometí:
me he robado tu foto,
que, en Internet, has guardado,
la que, a comprender, me ha ayudado,
que de ti, todavía, siga enamorado...
Será designio de Dios,
el haberte encontrado?
Será designio de Dios
que, de tí siga enamorado?
Porque he de decirte, es cierto,
que, de pronto, me he encontrado,
que, de un amor que estaba muerto,
ese mismo amor, de nuevo, ha resucitado...
¡Sí! Es designio de Dios,
el haberte encontrado.
¡Sí! Es designio de Dios,
que de tí siga enamorado...