Que estará haciendo mi bella
JAPO:
A esta hora
Donde las almas de los poetas surcan la tierra
En esta hora melancólica
Donde los versos lloran sangre
Que será de ti mi dulce JAPO.
Que será de tu hermosa cabellera,
De tu perfil perfecto.
¡OH: mi dulce Japo!
Te has vuelto un anhelo anhelado
Aún en la muerte besare tu labio virgen.
En cada mañana fría…
Mi cuerpo será tu abrigo.
Tu refugio invernal: mi corazón!....
Naufrago medio moribundo
Al borde de la muerte
En medio de un océano de llanto
Me hallaba refugiado
De la nada cual ave mensajera
Apareciste tú una hermosa sirena
Me diste un mensaje, el mensaje del amor.
Mis poemas ya no serán largas avenidas donde
Solo el dolor y la soledad
Paseaban sus cadáveres ¡YA NO MAS!
¿Qué es el dolor? No lo sé,
lo he olvidado
El llanto que lloriqueaba,
Día y noche, hoy por fin caduco.
Hoy mis versos
Tan solo transmiten
Un dolor ajeno.
Días fértiles han de venir
Con tu sola presencia: mi dulce JAPO.