A la espera de la oscuridad, pasan los instantes,
abrazándonos, entregados al amor a la ternura,
saboreándo nuestros besos como tiempos de antaño,
escuchando, a lo lejos, el tintineo de los campanarios.
Abrázame como siempre lo haces mi amor,
mi cuerpo suspira por ti, se abre mi alma como una flor,
lléname de tus besos, como llena al campo el rocío,
entrégame tus besos, tus deseos amor mío.
Crepúsculo en que la lluvia va cayendo ,
nos susurra entre nuestros silencios,
partiendo desde lo más alto del cielo,
componen una bella melodía para tus ojitos negros.
Ven a mí, a mis brazos que para ti los tengo abiertos,
vuelvo a besarte cuando tu boca nuevamente encuentro,
nuestra alcoba es nuestro íntimo paraíso,
estar juntos para siempre es nuestro destino.
Entrégate al amor, conmigo, sin miedo,
a la pasión que envuelve todo en llamas,
a la luz que nace de la luna lejana,
entrégate a mis besos, al idilio que viaja con el viento.
Amor, disfruto tanto la noche preciosa,
al estar contigo, en tus brazos en las sombras que te hacen misteriosa,
al sentir tu cuerpo junto al mío, al ver tu inocente mirada,
escuchar tu respiración, al sentir tus besos mi niña amada.
Sonámbula entra la niebla,
junto con nuestro amor se combina al entrar por debajo de la puerta,
parece sombra que rodea tu hermoso cuerpo,
se ve fantástico entre la bruma y el espejo.
Cada noche es para nuestro amor un nuevo comienzo,
así, siempre es como la primera vez que lo tocó el viento,
nunca es nada igual, todo es encanto,
todo es muy hermoso en nuestro nocturno escenario.
Corazón de medianoche,
amor que nos lleva a un mar de revelaciones,
todas hermosas, llenas de amor, maravillosas sensaciones,
sólos tú y yo, amándonos en infinitas uniones.
Noche de estrellas en la que me miras alucinada,
noche de sonrisas y sueños, noche de almas enamoradas.
Siempre estaré contigo, te lo prometo, tú eres mi mañana,
eres mi presente, mi eternidad princesa amada.
“Se unen con amor infinito nuestros labios, en ellos mi alma se ha desnudado, tu cuerpo, para sí me ha tomado, desde hoy mi alma es tuya, para todos nuestro años, poesía sin final en la que nos amaremos como tu corazón me ha enseñado, entregándonos a nuestro mundo, para todos extraño, donde no pasa el tiempo, ni los siglos, sólo el canto de los pájaros, donde tiernamente nos besamos, donde eternamente se unirán nuestros labios.”