Te vi partir…
el silencio me aturde,
te busco en la poesía,
en las coincidencias.
¡Te echo de menos!
Te encuentro en mis sueños,
como escenario, el firmamento,
ahí estas…
eterno, sabio.
Me enamoras!
Me seduce tu aliento,
lentamente te beso,
bebes de mi,
mis sentidos se entregan.
Los acordes de mi cuerpo,
se estremecen al sentir,
el calor de tu vela encendida,
que permanece en mi.
Las estrellas nos observan;
desesperadas,
quieren escuchar la orquesta
de nuestras almas
que entonan notas
de pasión tan altas,
que solo ellas
y el viento alcanzan.
Despierto, no estás…
solo tengo éste poema,
las coincidencias
y un café.