daniellito

Los niños lloraron

Los niños lloraron   I

 

Los niños gritaron 

los niños gritaron

tapando sus bocas

recogiendo su llanto

ellos lloraron

de frío

de hambre

de miedo

de espanto

el cartón se moja

pierde su forma, su tamaño

y los niños lloraron

los niños lloraron

se mojan sus camas

el terruño se desploma

se empapan del suelo

de arriba, de abajo

colador en la cabeza

y se llena el vaso.

 

Se hecho a perder el molde de arcilla

muy inclinado

estaba torcido

parecía una despeñadera

los niños lloraron

los niños lloraron

el suelo se movió

el río y el suelo

sus juguetes nadaron

las cosas se hundieron

el barco es desarmable

hecho de mentiras

y de material denigrante.

 

Volaron, volaron

las gorras volaron

partieron dormidas

todo asolado

dejando gritos

y coleccionando llantos

los niños lloraron

los niños lloraron

perdieron su árbol

perdieron su árbol

se los arrebató un cuervo

un buitre, un zángano

los niños lloraron

los niños gritaron.

Los niños lloraron II


Ellos lloraron
de frío
de miedo
y de espanto
sus techos volaron
volaron, volaron
dejando calvicie
dejando desamparados
de arriba , de abajo
donde el suelo era fango
los niños dormidos
cortaron su descanso
quedaron descalzos
lloraron , lloraron
de miedo, de espanto
temían su vida
temían al barranco
a la lluvia, al fango
al mortal escombro
quedaron solitarios
la oscuridad los sostenía
estaban atados
los pies no corrían
el miedo afectaba sus actos
ellos lloraban, lloraban
no eran ciegos, no estaban soñando
ellos sabían , estaba pasando
eran ruinas, la vida y el espacio
otro planeta, dibujaron sus manos
la realidad lo atacó, estaban equivocados
inocencia, inocencia, tapiada, tapiada
acabó en los restos, en las piedras y en el llanto
no lo sabían, los sueños están en otro lado
lloraron, lloraron
están desamparados
los huevos sin nido, y el nido sin árbol
jamás lo pensaron, jamás lo pensaron
eran unos niños, antes del timbrazo
eran niños antes del holocausto
lloraban, lloraban
no era su culpa, sino de los desgraciados
de los parásitos, de los cobardes desgraciados
lloraron, lloraron, sus casas se convirtieron en polvo volando