“Ofendiendo amigos, maldiciendo destinos y ofreciendo pena con mis ojos es a lo que he dedicado el día de hoy
donde solo veo una distante luz que demuestra lo frágil del ser humano en este mismo camino donde voy,
y si es desventura saltar al precipicio
por ti lo hare parte de mi peor vicio,
el cual amare más que el dolor que se ha calado en mi triste alma
ese mismo día donde tu ser dormía a mi lado en esa hermosa y profunda calma,
antes de dejar solo tu aroma en mi cama donde tu ausencia un fiel testigo
que me recuerda cada parte de tu piel dibujada con mi boca como ese silencioso castigo…”