Luis Rayo

EL POEMA QUE HIZO HUELLA (soneto)

 

Muchas horas pasaron y una  bella

silueta recordó tu lindos ojos,

tus mejillas hacían juegos rojos

con tu pasión de joven como estrella.

 

La rosa se asemeja a una doncella

 y tu figura a dama con antojos.

Supe aplacar al fin nuestros enojos

con el dulce poema que hizo huella.

 

Cuántas horas la luna me miraba

acariciando rostro tan hermoso

y cuerpo tan esbelto y delicado.

          

De ese encuentro el amor tierno volaba

como un astro en el cielo luminoso,

cuidé al amor y al  pétalo tocado.