La soledad camina hacia mi como pintura derramada, como suspiro y viento, que
seva pintando como obra de arte en mi cuerpo. Se pega a mi
como engrudo, como chapopote.
Recore mi piel como petrolio crudo, se deslisa
como serpiente en agua, se mueve como viento
en pradera.
Su voz es silbido de muerte. Cancion de jilguero
cuna que adormece, no hay tiempo. Sus notas se sienten
como jotas de lluvia, frias como la misma vida.
Solo escucho y no siento, as silencio que quiero
escuchar, mi muerte acercarse como gusano de tierra,
anciana gorobada vestida de negra.
Me adormece como tambor de guerra, postrado en la cama
busco mi corazon mientras ella avansa, no lo escucho mas.
Esta a mi lado silbando la muerte, me acaricia con sus alas y el viento toca
me canta duerme te mi nino duermete lla que llego la muerte
y se quedara.
Lo escuho latir pero no lo siento, la deseperacion me come
donde esta donde esta.
As silecion que que la soledad me esta hablando.