Te dejaré un mañana para que pienses hoy,
quién pasó por tu vida y quien fue el mejor;
si en los pasos que diste nunca hubo tropiezos,
y si fuiste feliz cuando dabas tus besos.
Te dejaré un mañana por si algo recuerdas,
quién fue bueno contigo o si alguien mintiera;
si te abriga el dolor de alguna quimera,
o prefieres tenerme por doquiera que fueras.
Yo pasé por tu vida eso nunca lo olvido,
y sonrió al recuerdo junto a ti lo vivido;
como el río que suena si trae piedras rodando,
o cual llanto que brota de tus ojos llorando.
Te dejaré un mañana para que pienses hoy,
que aquel hombre desnudo que subía a tu cama,
era el hombre que amabas y decías que adorabas;
y por sitios que vayas sigo siendo el que soy.
Así cuando amanezca al mañana que es hoy,
y el rocío refresque tu memoria aturdida;
sigue siempre de frente como un reto al destino
que si este lo quiere yo estaré en tu camino.
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José Miguel (chemiguel) Pérez Amézquita