Querida Caperucita: te escribo con alegría
esta pequeña cartita ya que quiero preguntarte,
mi muy querida amiguita ¿Si puedes venir un día
a hacerme una visita?
A mi me gustaría mucho, porque yo, yo me la paso solita.
Vivo en una casa grande, llena de cosas bonitas,
con muchas habitaciones donde podemos jugar.
Cada quien tiene su auto, su estéreo, televisiones
y varias computadoras, tiene jardín y balcones,
sembrados con muchas flores.
No vivo en una mansión... y me cuida una señora.
Tengo piscina en el patio y una casa de muñecas,
con muchos juegos de te y ollas para cocinar.
Tengo una gran motoneta con la que salgo a pasear,
patines y bicicletas, también tengo patinetas
y hasta tienda de acampar, las verás en tu visita,
aquí tengo mil juguetes, pero me falta amiguita
alguien con quien jugar.
Pregúntale a tu mamá si te permite venir,
no nos vamos a salir, siempre nos van a cuidar.
¡Puedes quedarte a dormir!
Por la noche cuando vuelvan mis papás de trabajar,
nos preparan de cenar y hasta nos dan galletitas.
Seguro que de la cena algo te puedes llevar,
para darle a tu mamá y también a tu abuelita.
Por favor caperucita pregúntale a tu mamá...
Dile que aquí no hay lobos ni tampoco leñadores,
esta es casa de señores de buen nombre y sociedad,
que nada te va a pasar, pagamos seguridad.
Por favor amiga mía ven a hacerme compañía,
que muero de soledad.