ADÁN
¡Tonto, pobre niño tonto!
Siempre te han de engañar,
disfrazándote fragancia
cuando muerte es lo que hay.
Seducido a la pasión
con palabras lisonjeras,
no supiste decir ‘no’,
a esa ambición traicionera.
Perfecto fuiste creado,
a imagen de Dios te hicieron,
para reemplazar aquel
que fue exiliado del cielo.
Desde el principio, oh, hombre/
la envidia te derribó,
porque el otro no quería
verte a ti de sucesor.
Y por no escuchar la voz
de aquel que te dio la vida,
la tierra se hizo maldita
y sangre manchó sus días.
Hombre rojo, ‘Adán’ tú eres/
quien vende su dignidad,
por unos verdes papeles,
extraídos de maldad.
¡Tonto, pobre niño tonto!
la avaricia te ha torcido,
caminas ciego entre sueños,
y en nubes andas dormido.
Te veo descostillado,
de dormir por pleno vicio,
aferrado a la lujuria
y también al egoísmo.
No cabes dentro de ti,
el poder te hace estallar
y sigues como Caín
asesinando a la par.
Destartalando el planeta…
¡Ya no es jardín de ilusión!
Tu ambición lo ha convertido
en un mundo en perdición.
Mira el fruto de tus manos,
Lo que tu mal cosechó:
lugares deshabitados,
muerte, hambre y destrucción,
un mundo desubicado
camino hacia la extinción.
radiación hasta en el aire,
todo en contaminación,
y el fantasma de la guerra
siempre haciendo aparición.
Enfermedades por miles:
Cáncer, Sida, desnutrición,
virus, gripes de animales
y también el mal de amor.
Hombre… necio, necio has sido,
buscándole solución,
al irremediable daño
que causó tu intromisión.
Ahora respiras sin vida,
después que él… te la dio,
pero tú, amas la muerte,
tu sino es de perdición.
Adán, padre de mentiras,
engendro que anda sin Dios,
quien fuera de sus alcances
quiere encontrar salvación
.
Y se embarca hacia la luna,
hacia Marte ó a Plutón ,
pues ya no encuentra el camino
del paraíso de Dios.
Ya la tierra has destruido,
sólo por vil ambición,
desde el principio así ha sido,
¡No puedes decir que ‘no’!
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