Niño que vienes al mundo
Y lo despiertas con tu alegre llanto
Que llega hasta el llano,
En donde la algarabía del canto
Se escucha en lo profundo,
Y nadie se compadece
Ante tal encanto.
Tú, que eliges donde y que color querías tener
Para ser interesante este paseo en el Edén,
Edén contaminado por el des ven
Que prometiste dejar tu huella,
Como requisito de unas horas
Que se convierten en años,
Para ser merecedor del triunfo en la meta,
Como el médico que presta su año a la comunidad,
Paseo cortó en tu tiempo,
Que has deja pasar un segundo,
Dejando olvidada la promesa de cambiar un poco a este mundo,
Misión encomendada que ya no te acuerdas
El que debías hacer, por tu vagancia
¿Acaso tú también la has olvidado?
¿Recuerdas tú a qué viniste?
Y que camino debías coger,
No se si mi camino es el correcto
Pero lo que sí recuerdo
Que yo era y soy un poeta.