El órgano vital que tú deseas
te he de entregar, apenas quede claro,
que no soporta la mínima condena
que lo sojuzgue o lo someta a esclavo.
El viene de una densa historia
donde el dolor dejó una zanja abierta
y es muy difícil borrarle a su memoria
una herida que al recuerdo inquieta.
Si el tuyo es un cariño verdadero
no te permitas el dañino ahogo
porque el dominio no asegura nada
tendrás el privilegio todo
del gran amor que en mi camino quiero
un amor libre, de paz... de inmensa calma.