En el fondo del parque veo una sombra,
un ser fulminado por la existencia
apenas mueve un brazo alcohólico,
miles de rostros su boca nombra
la locura ya no hace resistencia
el pobre es uno más en la hierba.
Un pájaro negro, común, sin alma
camina buscando la vida en la grama,
todo carece de luz, de unidad absoluta
de ese sentido lógico del que todo hablan.
El borracho está sentado en aquel banco,
parace que estuviese naciendo a la vida,
tal vez hoy sea una aventura cósmica,
algo inventará su delirio para existir,
el pájaro negro desapareció en alguna nube.
Una mujer casi muerta se sienta a su lado
de la nada aparece una botella,
uno dos tragos se pueden permitir,
la vieja lo abraza, le da un beso en la mejilla,
ahora caminan, se tambalean...
desaparecen como el pájaro, en la misma nube.