Mañana volveré a creer...creer en Dios
en la vida, y quizás en ti;
mañana sonreiré al ver salir el sol,
al oler una flor al ver tu sonrisa.
Mañana volveré a mirar a los ojos
a todos los que encuentre, hasta mis
enemigos y a ti.
Mañana no pensaré en mí, pensaré en
mí madre que ya no está, en hacer algo
bueno sin egoísmo y en ti
aunque sea un momento.
Mañana no lloraré por mí,
lloraré la pena de un amigo,
la tristeza de mi hermano
y lloraré por el mundo que agoniza
en desesperación.
Mañana creeré, sonreiré,
miraré, pensaré, lloraré,
pero eso es mañana, y quizás ese mañana
no exista.