Como cerca no me sirves
y lejano me conmueves,
así te quiero, lejos!
sin pensarte cuando llueve,
sin tener ningún reflejo
que achaque la memoria
de mirada enamorada,
de abrazo con euforia,
que yo no tenga nada
así puedo quererte,
solamente algún poema
que me sea indiferente.
Con la ilusión gastada
y el amor carente
porque sé que no me amas
y eso más me hace quererte,
tiempos y destiempos,
y no culpo al meridiano
sólo un sueño inocente
que al fin fue despertado.
Te até por unas noches
y volamos enseguida,
nunca rocé tu piel,
cada uno a su guarida.
Por eso te quiero, lejos!
a donde aún eres querible,
a donde va la fantasía
en algunas noches tristes,
y te esfumo con el día,
otros rostros me acompañan
y otras almas te enamoran
porque estoy aquí, lejana.