Luis Rayo

ASÍ ERES TÚ, COMO LAS ESTRELLAS

Después de haberte contemplado

 

en la caída del crepúsculo encendido,

 

bailé de gusto, como un enamorado

 

en esta tierra de semejanza

 

al edén de los ensueños,

 

y pude acariciar los horizontes,

 

donde tu figura de Venus resaltaba

 

como un lucero de diamantes,

 

como las estrellas que subían y bajaban,

 

como lo hace también el firmamento.

 

Así eres tú, como las estrellas infinitas

 

que se mecen en el cielo.