Las hojas que caen
como lágrimas
no van a cuenta de tu adiós
ya no…
el cielo color de amenaza
tan sólo avisa
la lluvia que se avecina
sobre tu ausencia, ya no…
pero me trae la brisa
que en el rostro siento
una caricia
de tus manos, ya no…
este sorbo siempre de tarde
del ave el canto
en el viento la fragancia…
son campanadas ahora
que mi vida continúa
aunque contigo, ya no…