Déjame aprender de ti…
De tu alma:
Diáfana, como tu carisma,
igual tu verso transparente;
Tu voz, que es tan diferente
y te hace ser… como tu misma.
Déjame aprender de ti…
De tu corazón:
Divino latir que no amaga
en su brindis de tanto y tanto
regalar ese imponente encanto
que me fascina… y me embriaga.
Déjame aprender de ti…
De tu vida:
La fuerza que en si es Poesía,
lo natural de ejemplo alentador,
tus consejos de un ser convencedor,
de contagiar tu cadencia… tu alegría.
Déjame aprender de ti…
Aquella parte de tu inocencia,
guardada aún en tu sonrisa así;
Y de tu amor, déjame aprender de ti,
tu comprensión… y tu paciencia…
Alviz Neleb
Septiembre 22 de 2011
7:57 a.m. - Viernes