Los días parecen detenerse
No sin que el roció deje de sentirse
Salado bajando sobre mi mejilla
Ráfagas de viento, anunciando llovizna
La cuenca negra de tus ojos, con asombro mira
Mientras yo absorto admiro tu belleza
El mar se inquieta con el viento
Más tú tranquila, viendo a la lejanía
Las gaviotas pescando en las orillas
Yo buscando palabras nuevas
Para motivar tu venida
En la mano una rosa
Y en mis labios una sonrisa
Tu pelo alborotado por la briza
Y yo pronunciando palabras sentidas que hablan de amor
Nuestros sueños cobrando vida
Con tú mirada puesta en la mía