Bendita lluvia:
despierta al caracol
de un largo sueño.
En mi desierto,
una gota de lluvia
es dulce beso.
Lluvia nocturna:
refresca nuestros sueños
y les da vida.
Lágrimas llueven,
cuando riegan mejillas
y se desbordan.
24 de septiembre de 2011
Pau Fleta